Rescate de perros perdidos, así actuamos.


La Lliga per a la proteccio d’animals i plantes de Barcelona registra anualmente un elevado número de adopciones de animales, y en ocasiones algunos se pierden debido a la falta de prudencia y/o desconocimiento de los adoptantes.

En la gran mayoría de casos que nos encontramos en la protectora se trata de perros recién adoptados, animales que, en casi todas las ocasiones, se sienten asustados o desorientados por estar en un lugar nuevo y con personas que no conocen.

Cuando nos llega un aviso de un perro que se acaba de perder, empieza una labor de equipo que nunca se sabe cuándo ni cómo va a terminar. La familia está desesperada, por lo general no sabe qué tiene que hacer, mientras voluntarios y trabajadores se ponen en marchar para organizarlo todo… El rescate de un perro perdido se suele dividir en dos partes: dar con el paradero del animal y atrapar al animal.

Contactar con la família

En primer lugar, debemos ponernos en contacto con la familia: es muy importante saber qué ha pasado, cómo ha pasado, dónde y a qué hora… Cualquier dato o información de todo lo que llevaba el perro en ese momento es muy importante para empezar la difusión.

Difusión

A continuación, se comunica la desaparición a las bases de datos AIAC (Arxiu d’Identificació d’Animals de Companyia) y/o ANICOM (Registre General d’Animals de Companyia) para que quede constancia de la misma. Todos los animales adoptados en la protectora llevan chip de identificación, y los datos de este figuran en las bases de datos citadas. Si el chip lleva asociado un aviso de pérdida, será más fácil localizar al dueño si alguien encuentra al perro. Asimismo, hay que dar aviso a la Guardia Urbana y a la policía local de la zona; puede ocurrir que el animal perdido ocasione daños de algún tipo, y esto puede motivar una sanción si no se ha comunicado su desaparición. Además, si una persona encuentra un animal, es habitual que lo ponga en conocimiento de la policía; si esta ya ha sido avisada, la resolución del caso es mucho más ágil.

Por otra parte, resulta también muy útil colgar carteles con la foto del animal, los datos de contacto y toda la información posible, así como avisar a protectoras, perreras y veterinarios de la zona. Los carteles contribuyen a que la gente reconozca a ese perro que acaban de ver cruzando la calle y sepa que está perdido. Para nosotros esto es de gran ayuda, pues nos permite tener una cierta idea de por dónde empezar a buscar. No es ninguna tontería: los perros pueden recorrer grandes distancias en poco tiempo, y sin avisos de dónde ha sido visto el animal, es muy difícil comenzar la búsqueda. Lo primero que debería hacer una persona cuando se encuentra un animal es comprobar si tiene chip, ya sea en clínicas veterinarias o en comisarías de policía, por eso es importante avisar al mayor número de sitios posible.

Hoy día, las nuevas tecnologías también son de gran ayuda: páginas web y redes sociales (Facebook, Twitter, Instagram…) logran que el nombre del animal perdido llegue a más sitios, y más gente pueda verlo y encontrarlo; muchos perros han podido ser devueltos a sus dueños gracias a las redes sociales.

La organización

El trabajo en equipo entre los voluntarios y trabajadores de nuestra protectora es muy importante; tan pronto como nos llega un aviso, empezamos con su difusión interna: cuantos más seamos, mucho más fácil será poder localizar al perro perdido… Cuando las circunstancias lo permiten nos desplazamos sobre el terreno, formamos grupos para colgar carteles, y en cuanto empiezan a llegar avisos de dónde ha sido visto, nos desplazamos para ir acotando la búsqueda junto con la familia. Buscar un perro que se acaba de perder no es tarea fácil, se necesita mucha ayuda y paciencia. En algunas ocasiones es un proceso muy largo (semanas o meses) y se requiere constancia para poder recuperarlo.

Atrapar al animal

En la gran mayoría de casos, el perro perdido lleva muy poco tiempo con la familia, seguramente no reconoce a sus miembros y todavía no confía en ellos. Por este motivo es fundamental que voluntarios y trabajadores de la Lliga se vuelquen en su búsqueda: el perro suele conocerlos más que a su nueva familia o bien estos tienen más experiencia sobre como reaccionar ante el animal si lo localizan. No obstante, hay que tener en cuenta que un perro perdido suele encontrarse en estado de pánico y es posible que no reconozca a nadie. En ese momento, su instinto de supervivencia es tan alto que hasta puede desconfiar de sus propios pasos, por eso es muy importante saber qué cosas SÍ se pueden hacer cuando se intenta coger a un perro perdido y qué cosas NO se deben hacer nunca.

Lo que nunca debes hacer

Correr detrás del perro: se sentirá amenazado y aún correrá más, sin que nadie, por mucho que corra, le pueda dar alcance; además existe el riesgo de que el animal pueda sufrir algún daño, y también nosotros. Si llamas al perro por su nombre un par de veces y sale huyendo, no sigas llamándolo así.

Lo que debes hacer

Si no te conoce o reconoce, gánate su confianza: agáchate siempre para no parecer amenazador, habla con voz suave, no hagas movimientos bruscos e intenta que se acerque atrayéndolo con comida.

Por lo general, con estas pautas hemos conseguido coger a los perros perdidos; en otras ocasiones hemos necesitado la ayuda de gente más especializada y equipada con instrumentos para estos menesteres, como por ejemplo las jaulas-trampa. De todas formas, lo mejor es evitar que el perro se pierda, y eso se consigue con unos sencillos consejos:

Consejos

  • Si has adoptado al animal hace poco tiempo, procura llevarlo con un arnés seguro y ajustado a su medida. Según el tipo de perro puedes utilizar además collares antifuga tipo martingale. Y lo más recomendable durante el proceso de adaptación llevarlo con collar y arnés con correa de doble enganche, hasta que tengas la seguridad de que el perro no va a intentar quitarse el collar o arnés si se asusta. 
  • NUNCA lo dejes suelto hasta que haya pasado el tiempo suficiente y tengas la absoluta seguridad de que no siente ningún miedo y que responde a tu llamada.
  • En los pipicans o parques para perros, comprueba que no haya ningún lugar por donde pueda salir y que no pueda saltar las vallas; si tienes alguna duda, no lo dejes suelto. 
  • Lleva siempre bien sujeta la correa para evitar que se te vaya de las manos si el perro se sobresalta y da un tirón. 
  • No lleves al perro con correa tipo flexi hasta que confíe en ti plenamente. Si se te escapa, es probable que se asuste y salga corriendo. Este tipo de correas han causado muchas pérdidas de perros al caer al suelo por el ruido que producen.
  • Si el perro tiene miedos, no trates de que se enfrente a ellos de golpe, hazlo poco a poco y conforme los vaya superando. 
  • Si es época de verbenas y fiestas populares donde se tiren petardos, no sueltes al perro: a la gran mayoría de canes les asusta el estruendo. 
  • Comprueba periódicamente que el chip sigue en funcionamiento, a veces se desactivan y esto puede ser un gran problema si el perro se pierde, y, aunque tenga chip, ponle una plaquita con tu número de teléfono: algo tan sencillo puede significar que su desaparición quede en un simple susto.

7 de mayo de 2021